NUTRICION DEPORTIVA ENTRENAMIENTO

POR: L.N. JESSYCA LOPEZ BALTAZAR


Para un mayor rendimiento deportivo se requiere de una buena alimentación.

Hay varios factores relacionados con el rendimiento físico del deportista, uno de ellos es la alimentación.

La correcta alimentación contribuirá a mejorar el desenvolvimiento físico de una persona. De tal manera que pueda mantener su peso, aumentar su rendimiento y evitar la fatiga.

Es muy importante que el deportista aprenda a elegir lo alimentos que más beneficiarán su salud. Que provea las vitaminas y minerales necesarias, así como un mayor aporte energético. El plan de alimentación a seguir será basado en el tipo, la duración e intensidad del ejercicio que se esté realizando. Por lo que la distribución de los nutrientes (hidratos de carbono, proteínas y grasas) puede variar entre un individuo que practica  levantamiento de pesas a alguien que practica la natación o atletismo. De tal manera que el plan de alimentación debe ser personalizado.

A continuación te damos algunos consejos de alimentación para mejorar tu desempeño físico:

Los hidratos de carbono son el principal combustible del músculo, de ellos obtendrás la energía. Estos los puedes encontrar en las pastas integrales, arroz, pan integral, las frutas frescas etc.

La energía que se obtiene de los hidratos de carbono se almacena en forma de  glucógeno en el músculo e hígado, pero cabe mencionar que las reservas de estos son limitadas, por lo que pronto se agotarán (entre la hora y 2 horas de haber comenzado con el ejercicio).

Es importante no abusar en el consumo de ellos, ya que pueden ocasionar un incremento de peso.

     Proteínas: a consecuencia de una mayor desgaste, se debe aumentar su consumo, las encontramos en la carne, leche, aves, etc.

     Grasas: se deben consumir principalmente las insaturadas, contenidas en los aceites, nueces, almendras, pescado, entre otros.

     Vitaminas y minerales: estos se obtienen consumiendo frutas y verduras.

     Agua: Es importante mantener el cuerpo hidratado durante y después del ejercicio. Esto para mantener la temperatura corporal y  evitar un desequilibrio generado por las pérdidas de agua que se tendrá a través de la sudoración. En promedio se debe consumir entre 2.5 a 3 litros diarios.

 

¡OPTIMIZA TU RENDIMIENTO!